viernes, 9 de marzo de 2018

O TRABALLO COLABORATIVO EN GRUPO


O traballo colaborativo en grupo é unha estratexia de aprendizaxe que foi gañando cada vez máis espazo co paso do tempo nos procesos de ensinanza, ata chegar a converterse nalgo clave na educación a día de hoxe.

Un grupo de traballo colaborativo está formado por 3 ou máis persoas que, deben interactuar e aportar coñecementos e ideas para chegar a unha meta ou un obxectivo común. Unha boa  socialización é, por tanto, unha peza clave para que o grupo funcione con éxito.

Vantaxes:

MOTIVACIÓN: esta vese incrementada, xa que a interacción e a colaboración permite que aprendan uns doutros, ademais da responsabilidade que trae consigo o contribuír persoalmente ao éxito dos demais.


AUTOAPRENDIZAXE: todos poden aportar o seu gran de area ao grupo, opinar sobre o traballo dos demais e localizar erros e acertos. A aportación de ideas será moito maior que nun traballo individualista.


SOCIALIZACIÓN E VALORES MORAIS: axuda tamén por tanto ao desenvolvemento da propia personalidade, pode contribuír en aspectos como a empatía, a solidariedade, a tolerancia, o respecto...


VIABILIDADE: algúns traballos que son inviables para pedirllos aos alumnos individualmente, son, sen embargo, realmente interesantes para traballalos en grupo.


UNIDADE: o sentimento de unidade e pertenza a un grupo sustenta todo o dito anteriormente e fai do traballo en grupo algo ameno, interesante e divertido á vez que este aporta un gran valor pedagóxico.


Ademais, bríndanos unha boa base no tocante ao futuro laboral, xa que a colaboración e a cooperación na maioría dos postos de traballo é algo necesario e inevitable.

Aínda que as vantaxes que presenta o traballo en grupo son moi significativas, cabe tamén falar dalgunhas desvantaxes que se poden chegar a producir nalgúns casos, como son as seguintes:

- O grupo pode esquecerse do proxecto común que significa traballar en grupo e tan só cumprir coas súas propias obrigas.


A contradición entre os integrantes ou a ansia de autoridade dalgún deles.


- As presións sociais do grupo para integrarse, para ser aceptado e aportar ideas de valor pode ocasionar o aplastamento dalgún dos integrantes.

Por outra parte e en casos puntuais, tamén pode ser efectivo o traballo por parellas, xa que é unha opción que se sitúa entre o individual e o grupal.
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martes, 6 de febrero de 2018

ORGANIZACIÓN DE ESPACIOS.

En toda practica deportiva uno de los aspectos más importantes es la organización del espacio donde se va a realizar la actividad.
Lo primero que se debe hacer es tratar de encajar el grupo en el espacio que tienes para realizar sesión.
Una vez que tienes acatado el lugar se debe tener en cuenta varios factores para que la sesión sea productiva y segura.
En el punto de productiva tiene mucha importancia el profesor/entrenador... ya que tiene que gestionar y encajar todos estos temas relacionados para una correcta y enriquecedora actividad.


MOTIVACIÓN
El primer paso es crear un ambiente positivo, rico en estímulos y respuestas, donde los jóvenes se motiven intrínsecamente. Se debe facilitar un clima adecuado en el que tanto el entrenador como los jugadores se sientan cómodos e integrados, aseguren su presencia en un grupo, compartan el valor de colectivismo y se establezcan relaciones afectivas y de intercambio.
Hay que tener en cuenta que el modelo que se plantea debe estructurarse desde este nivel y que su cimiento es la confianza dentro del grupo. Si el entrenador no es capaz de proporcionar un terreno apto para las experiencias positivas de los participantes, difícilmente podrá avanzar en la consecución de los objetivos propuestos.
El proceso para preparar esta fase comienza antes de recibir a los deportistas. Conocer los antecedentes de los jóvenes puede darnos muchas pistas de sus comportamientos y actitudes, permitiendo anticiparse a los problemas.
Es oportuno, en el trabajo diario, establecer rutinas de organización de las sesiones que faciliten la toma de responsabilidad del grupo, especialmente en la utilización y almacenamiento del material y el formato de la sesión. Explicar el contenido del entrenamiento, sus objetivos, y finalizar con una reflexión final acerca del desarrollo de la misma puede ayudar a interiorizar lo que se pretende transmitir.

 RESPETO
En este nivel se busca obtener autoridad, unida al afecto incondicional y a la máxima atención, sin dar cabida al autoritarismo ni tampoco a la permisividad. Para ello se deben establecer una serie de reglas que rijan los entrenamientos y partidos. Hay normas que son innegociables, como el rechazo a la violencia física y verbal o el respeto a los compañeros. A partir de ellas, se comenzará un proceso de negociación democrática para establecer el resto.
Es importante que estas limitaciones surjan de un previo acuerdo entre todo el grupo.
De esta manera se sentirán en la libertad de elegir y ser partícipes de las decisiones del equipo. Es posible que puntualmente alguno de los miembros del grupo no se implique en la actividad propuesta, pero dicho pacto de limitaciones libremente aceptadas puede ser un estímulo para facilitar el desarrollo normal de la sesión.
Este nivel es una base sobre la que construir posteriores valores y garantiza el funcionamiento de la actividad. Para ello es necesario aceptar a todos, respetar al educador, mantener cierto nivel de atención y establecer un adecuado nivel de confianza cimentada en la empatía por los demás. El entrenador o formador, tiene que ser coherente con las normas y con su comportamiento. También está sujeto a ellas y deberá ofrecer un buen ejemplo; de lo contrario, no tendrá ningún argumento moralmente válido para que ellos las cumplan.

COMPROMISO
 Estos pequeños retos deben servir al joven para iniciar una nueva búsqueda de éxito. Un éxito que, este caso, ya no es superar a un adversario sino superarse uno mismo, minimizando el aspecto competitivo y potenciando el trabajo personal y la capacidad de esfuerzo. El trabajo de motivación del formador es constante durante el proceso, resaltando en todo momento los progresos y reforzando su ánimo.

COOPERACIÓN 

En las estructuras deportivas actuales impera el carácter competitivo. Los jóvenes se esfuerzan por lograr objetivos que no todos pueden alcanzar, lo que conlleva interacciones muchas veces negativas. Desgraciadamente en demasiadas ocasiones desemboca en: “Tu éxito me perjudica; tu fracaso me beneficia”. En definitiva una estructura deportiva de desvínculo: “Tu compañero es un competidor, un rival, un obstáculo que saltar”.
Sin embargo, en las estructuras de carácter cooperativo, cada joven alcanza sus objetivos al mismo tiempo que el resto de sus compañeros, por lo que se promueve una interdependencia positiva entre los logros de todos los participantes. Aquí la frase que se desprende es la siguiente: “Tu éxito es mi éxito y mi fracaso, tu fracaso también, por tanto nuestro traba- jo, esfuerzo, problemas y soluciones son conjuntos”. El adversario coopera, por oposición, para que mejoren nuestras capacidades.
Lo anterior no pasaría de ser simple retórica si no fuera porque a través del fomento de las actividades físicas cooperativas dentro del ámbito deportivo, y por ende educativo, es posible modificar la concepción competitiva imperante en los juegos infantiles y en los deportes actuales. El panorama está repleto de factores como la eliminación, la desintegración, la agresión y el egocentrismo, entre otros, que podrían verse desplazados por la colaboración, la inclusión, la creatividad y la toma de decisiones conjuntas.
 

viernes, 26 de enero de 2018

MOTIVACIÓN A LOS ALUMNOS O DEPORTISTAS.


   VALORA y RESALTA el trabajo y el esfuerzo de todos tus deportistas. 
Facilita que les salgan las cosas bien y anima al desafortunado. La voluntad, la actitud es lo primera dinámica a construir.
    Asume tus propios errores y no hagas a tus deportistas responsables de ellos. 
Si un deportista no lo hace bien, debes tener claro que el primero que desea hacerlo bien es él. Si falla, la carencia es más nuestra, que suya. No descargues sobre ellos tus frustraciones y carencias como entrenador.
    Que tus actividades y comportamientos sirvan de ejemplo para tus deportistas. 
Eres su referencia por muchos años en lo deportivo y en lo personal.  Cuida tu imagen, tus palabras  y tus actuaciones.
    No busques sólo el rendimiento técnico, esfuérzate por conseguir valores éticos. 
Además de la mejora física y técnica también debemos tratar de educar e inculcar conceptos como la puntualidad, el respeto al entrenador, el compañerismo, el cuidado del material, actividades saludables como estirar antes y después.
    Lucha por todos tus deportistas por igual. No tengas preferencias ni prejuicios. 
Conocemos la dificultad de este punto, y sabemos de igual forma que en la mayoría de las ocasiones en las que se actúa de forma parcial se hace de manera inconsciente. Para evitarlo deberás escuchar y solicitar la opinión de terceras personas.  Piensa que desde un médico, un panadero, un informático o un cartero…todos vienen en “pijama”. Aquí todos y cada uno son igual de importantes.
    Sé humilde en la victoria y resignado en la derrota. Reconoce tus limitaciones y errores. 
Nunca será real la sensación que tengas o te hagan percibir. Ni serás tan malo como lleguen a decir, ni tan bueno como te hagan creer. Hoy puedes estar arriba y mañana abajo. La humildad en la victoria y la sensatez, objetividad y coherencia en la derrota serán buenos compañeros de viaje. Es importante, sobretodo, por la salud y bienestar de los deportistas, sé tolerante en sus malos momentos, no te olvides que tú eres el profesional y eres el que debe mantener el control de la situación y siempre sacarle hierro al asunto…ten mano izquierda y una sonrisa enorme. Si te equivocas no temas reconocerlo, los seguidores valoran mucho la sinceridad del LIDER. Aprende las pequeñas cosas que hacen únicos a tus compañeros, todos tenemos un punto en el que sobresalimos, no dejes de aprender de los que trabajan a tu lado, con ellos te harás grande.
.    Has de ser un MOTIVADOR. 
Será aquí, dónde se determine  una de las principales habilidades de un entrenador, de un dinamizador de grupo, el saber cómo motivar a más que un grupo, a la suma de todos sus individuos. Ponte en la piel de cada uno de tus deportistas, trata de recordar que acciones lograban en ti motivarte ante según qué actividades.
Para lograr la motivación del grupo, tendrás que acudir al principio de la individualización. Cada uno nos sentimos motivados ante diferentes estímulos. Para los más inexpertos el siempre buen consejo de la observación. Observar los gestos y actitudes de sus DEPORTISTAS en el desempeño de un ejercicio o acción determinada. Obtendremos una información muy valiosa, sobre la que construir nuestros métodos dinamizadores.
Siempre debes dar refuerzos positivos cuando se esfuerzan o consiguen realizar una tarea marcada, la clave es que se sientan mejor y más seguros con ellos mismos a través del deporte, y tú te sentirás igual como entrenador.
Recuerda que el deportista menos habilidoso, el que menos ha practicado deporte, o al que no le gustaba de pequeño o adolescencia porque no se le daba bien y tiene un mal recuerdo… es el deportista que requerirá de mayor diálogo y motivación añadida, lejos de dispensársela a los más aventajados y destacados
.   La importancia de un buen FEEDBACK
 
El feedback podemos darlo haciendo referencia a tres niveles distintos:
  1. Feedback a la relación: se da cuando hablamos de la identidad de la persona. Por ejemplo: “Tú eres bueno”.
  2. Feedback a las conductas: cuando hablamos sobre las acciones que ha realizado la persona. Por ejemplo: “Lo has hecho muy bien”.
  3. Feedback a los resultados: cuando hablamos sobre los resultados obtenidos por la persona. Por ejemplo: “Lo que has conseguido está muy bien”.

O TRABALLO COLABORATIVO EN GRUPO

O traballo colaborativo en grupo é unha estratexia de aprendizaxe que foi gañando cada vez máis espazo co paso do tempo nos procesos de e...